Los cadáveres están en la calle
donde los transeúntes han huido del fuego del pirómano.
Las voces, los quejidos y los llamados de auxilio
embarran las paredes
y tocan las puertas clausuradas por el temor
y por las manos de la muerte.
Los de afuera
y los de lejos
observan esta realidad en sus pantallas
pero se les disipa en sus pupilas miopes.
La ven confusa
y desdeñan la lava que incendiara la casa compartida.
Las banderas ondean con un viento generoso y sin dueño.
Sin duda,
la barbarie
y los ideales de un fanático
mueven torrentes
y por su insensatez mueren sus hijos
y tus hijos
en los muros que su odio ha levantado.
V-XVII-MMXVIII
Käthe Kollwitz, Death grabbing at a Group of Children, from series Death, 1934
Por Carmelo Gonzalez Velez
– Seattle, Washington –